BORA BORA (POLINESIA)
14:36
Bora Bora es un atolón en la Polinesia Francesa ubicada al noroeste de Tahití, a unos 260 kilómetros al noroeste de Papeete. Tiene una extensión de 259 kilómetros cuadrados. Este atolón está formado por un volcán extinto; rodeado por un lago separado del mar por un arrecife. El punto más alto es el monte Otemanu a 727 metros. El nombre original de Bora Bora en tahitiano es Pora Pora, que significa "Primer nacimiento".
En pleno océano Pacífico está la Polinesia francesa donde se encuentran las playas soñadas de Bora Bora. El paisaje de la llamada perla de la Polinesia es, sin lugar a dudas, el que promociona y aparece en las postales que se muestran del Pacífico Sur.
Bora Bora es un volcán ubicado en una de las lagunas más bellas del mundo. Sus aguas acogen todos los matices del azul y el verde.
En Polinesia todo ocurre muy despacio, al ritmo de las hojas gigantes de los árboles tropicales y del aleteo multicolor de lospeces. Los grupos de islas que componen la Polinesia Francesa son muy distintos entre sí por su cultura, clima y población. Sin embargo, el paisaje de todas ellas es bastante parecido: playas de arenas blancas y cocoteros, montañas volcánicas y lagunas de color turquesa adornadas de corales.
Entre las playas de Bora Bora, destaca la playa de Matira, un paraje de ensueño para los que buscan tranquilidad al más puro estilo tropical. En sus playas el fondo del mar es arenoso, sin bloques de coral y con pendientes tan suaves que es posible adentrarse a gran distancia mar afuera. Hacia ambos extremos de la playa aparecen ya las formaciones coralinas, lo que las convierten en excelentes aguas para practicar el buceo con snorkel
Bora Bora es un volcán ubicado en una de las lagunas más bellas del mundo. Sus aguas acogen todos los matices del azul y el verde.
En Polinesia todo ocurre muy despacio, al ritmo de las hojas gigantes de los árboles tropicales y del aleteo multicolor de lospeces. Los grupos de islas que componen la Polinesia Francesa son muy distintos entre sí por su cultura, clima y población. Sin embargo, el paisaje de todas ellas es bastante parecido: playas de arenas blancas y cocoteros, montañas volcánicas y lagunas de color turquesa adornadas de corales.
Entre las playas de Bora Bora, destaca la playa de Matira, un paraje de ensueño para los que buscan tranquilidad al más puro estilo tropical. En sus playas el fondo del mar es arenoso, sin bloques de coral y con pendientes tan suaves que es posible adentrarse a gran distancia mar afuera. Hacia ambos extremos de la playa aparecen ya las formaciones coralinas, lo que las convierten en excelentes aguas para practicar el buceo con snorkel
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